Las medallas y los pájaros

Vago por los costados de la ciudad,
por sus contrafuertes derruidos.
Vago ciego, sordo, vago como flotando.

Una luz de cuchilla me acaricia,
raspa el barítono:
“…Si vinieras de noche como un rey destronado.
Si vinieras sin saber a qué has venido.”

Vago  ciego, sordo, vago como flotando,
rey yo, sin corona yo,
repleto de autoestima,
comido por los pájaros.

Sobre este ripio construí mi fortaleza,
estas son mis medallas:
ni triste, ni alegre, ni lleno, ni vacío.

Nada me atemoriza,
nada me avergüenza,
nada me obliga.

Recojo un poco de tierra y la lanzo al aire,
estiércol y oro me devuelve el aire,
oro y estiércol para mí,
para el esqueleto que va conmigo,
vagando, etc., solo vagando




Share this:

ABOUT THE AUTHOR

En éste espacio el blog me pide que me presente. ¿Qué decir? nada extraordinario. Una viajera, alguien de paso. Vivo en La Rioja, Argentina y a diario encuentro éstas perlas que intento guardarlas aquí. Son regalos, agua fresca, oxígeno para el camino.

0 comentarios:

Publicar un comentario